Gure Esku ha comparecido esta mañana en la Comisión de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad del Parlamento Vasco, haciendo un llamamiento a la acción parlamentaria, a ir más allá del ejercicio de las declaraciones institucionales o de partido, a trabajar en profundidad para que el derecho a decidir sea ley, a realizar propuestas, buscar resquicios, proponer diferentes alternativas y aunar esfuerzos.
Intervención del portavoz Josu Etxaburu en rueda de prensa:
Gure Esku ha dicho en numerosas ocasiones que la voluntad mayoritaria de la sociedad vasca es clara: quiere ejercer el derecho a decidir. Gure Esku reivindica que el derecho a decidir debe convertirse en ley para dar cauce a esa voluntad.
En esta dirección, el pasado 22 de junio de 2022, vinimos al Parlamento Vasco con una solicitud que entregamos en mano a la Presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria. Hoy, 6 de febrero de 2023, ante la Comisión de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad, hemos expuesto el sentido y detalle de la solicitud, así como los compromisos que solicitamos al Parlamento para canalizarla. Pedimos que se adopten compromisos para que más allá de las palabras prevalezcan las acciones y podamos trabajar con la máxima ambición el futuro que se merece este país.
Como es obvio, el debate sobre nuestro estatus político y los pasos a dar para su consecución se están retrasando de legislatura a legislatura, una y otra vez. Por demasiado tiempo. Ya es hora de agarrar el toro por los cuernos. El derecho a decidir necesita un debate de país serio y profundo, más allá de los titulares del día. Nosotras estamos en ello.
Como destacaron cien personas referentes en la Declaración de Arantzazu firmada en diciembre de 2021: “Los y las vascas tenemos derecho a decidir nuestras instituciones políticas, nuestro estatus político y nuestro nivel de autogobierno, y las relaciones entre nuestros territorios de forma directa, sin límites y libre”, y en ese sentido, reivindicamos “la necesidad de trabajar, acordar y promover un proceso para decidir nuestro futuro”.
Dar un salto hacia la soberanía depende de nosotros y nosotras. Está en nuestra mano y depende de todas nosotras. Creamos en ello. Es el momento de remar en la misma dirección. Agentes, instituciones y ciudadanía debemos recorrer el camino de la mano, porque todos y todas tenemos cabida en esta senda y cada cual debe caminar por el tramo que le corresponde.
Tal y como hemos dicho, hoy hemos venido a exponer la solicitud que presentamos en junio en el Parlamento Vasco y que, dirigida al mismo, está firmada por 21.389 ciudadanos:
“Necesitamos herramientas de decisión al alcance de la ciudadanía y proponemos y pedimos al Parlamento Vasco que promueva el debate sobre nuestro futuro político, garantizando la participación efectiva de la ciudadanía, y que asuma, regule y desarrolle toda la capacidad de celebrar referéndums”.
Para canalizar la solicitud, hemos solicitado al Parlamento Vasco la adopción de tres compromisos:
Abrir un debate que construya un proceso para decidir nuestro futuro político y defina los pasos a seguir.
Favorecer y posibilitar un debate transparente y abierto en el que se escuche y reconozca la palabra de la ciudadanía.
Basar el proceso de decisión que se va a construir en la participación ciudadana, previendo mecanismos e instrumentos para ello, incluyendo una consulta para reafirmar la voluntad de la ciudadanía vasca.
Es tiempo de pasar de los dichos a los hechos, de dar un salto cualitativo y significativo en la construcción de país de cara al futuro de la sociedad vasca.
Les hemos pedido que creen y ofrezcan espacios con legitimidad democrática para representar el proceso de decisión, tejiendo los consensos necesarios para ello. Al mismo tiempo y considerando toda su complejidad, se debe facilitar y hacer factible la participación ciudadana en este proceso. Este país necesita que se ponga en marcha un proceso que haga posible decidir libremente. Entendemos que este es un reto colectivo, de ciudadanía, de agentes y representantes políticos y sociales. Cada cual tiene su misión. Por eso hemos hecho un llamamiento a los y las representantes políticos del Parlamento Vasco para que asuman las responsabilidades y compromisos que les corresponden.
En definitiva, hemos hecho un llamamiento a la acción parlamentaria. A ir más allá del ejercicio de las declaraciones institucionales o de partido, a trabajar en ello en profundidad, realizar propuestas, buscar resquicios, proponer diferentes alternativas, aunar esfuerzos. Para centrar el debate colectivo pendiente, ponemos sobre la mesa dos grandes interrogantes:
Por un lado, ¿la capacidad de decisión que hoy tenemos los vascos y las vascas sirve para responder adecuadamente a los retos actuales y futuros?
Por otro lado, ¿estamos los y las vascas satisfechas con el actual marco de relaciones entre los territorios vascos? ¿No sería beneficioso consolidar las relaciones y lazos históricos y culturales con miras a crear un nuevo marco que supere el actual?
Si queremos ser dueños y dueñas de nuestro futuro, urge, tras una reflexión sincera, concretar y adoptar medidas. En el desarrollo de un país, una sociedad activa y empoderada es un activo impagable y la activación y el compromiso de la ciudadanía es la garantía del desarrollo colectivo. Tenemos claro que la ciudadanía debe ser el motor del proceso soberanista y Gure Esku está dispuesto a aportar su contribución a este proceso, manteniendo las líneas de trabajo movilizadoras y empoderadoras habituales.
El derecho a decidir merece un debate serio. Tendremos que vislumbrar el proceso y definir la estrategia. Tenemos que dibujar el rumbo hacia nuestra soberanía, y construir un faro colectivo para poder llegar a buen puerto. Lo agradecerá la ciudadanía y toda la sociedad. ¡Es hora de coger el timón del futuro!