Los portavoces de Gure Esku Amalur Alvarez y Josu Etxaburu se han reunido hoy con Bakartxo Tejeria. A través de la Presidenta del Parlamento Vasco, Gure Esku ha hecho un llamamiento al Parlamento para que adopte una serie de compromisos en el camino hacia la regulación del derecho a decidir. Tras la reunión, han explicado en rueda de prensa cuáles son esos compromisos:
“Ultimamente, hemos escuchado a representantes políticos pronunciarse sobre el derecho a decidir. No obstante, más allá de sus palabras, vemos que no existen iniciativas concretas. Parecen estar a la espera; a la espera de lo que ocurra en otros escenarios, a que pasen los ciclos electorales. Preferiríamos escuchar menos declaraciones y ver más acciones. Creemos que la sociedad está cansada de escuchar que no es el momento idóneo. Este país merece una ambición mayor. El ansia de soberanía de este país no se ha apagado; al contrario: ese deseo de soberanía alumbrará el 2 de julio 400 cumbres a lo largo del Pirineo.
Somos un pueblo, y como pueblo, queremos que nuestro futuro político esté en nuestras manos. El 70% de la ciudadanía de los siete territorios está a favor de decidir mediante referéndum. 7 de cada 10: ¿Existe consenso más amplio que ése? ¿Cómo es posible que este parlamento, legislatura tras legislatura, siga posponiendo el debate sobre esta cuestión? El acuerdo político de 2018 representó a esa amplia mayoría, pero desde entonces los partidos se han distanciado de esa mayoría. No limitemos el derecho a decidir a declaraciones y titulares de corto recorrido: el derecho a decidir merece un debate serio de país.
Y es que la realidad es tozuda, y nos muestra una y otra vez las graves consecuencias de la falta de soberanía. La gestión de la crisis sanitaria ha puesto de manifiesto lo débil que es el autogobierno de nuestro país y lo fácil que resulta arrebatarnos desde Madrid y París nuestras limitadas competencias. A nuestras instituciones les faltan herramientas para cuidarnos, les falta capacidad para tomar las medidas necesarias. Por eso, después de todo lo vivido, deberían tener la determinación de profundizar en la soberanía, ya que las urgencias de cada momento tienen mucho que ver con los retos del futuro. La lucha de muchos alumnos y alumnas, profesoras y ciudadanas por poder realizar y corregir el Brebet en euskera en Iparralde es un hermoso ejemplo: han conseguido que la Comunidad de Aglomeración del País Vasco o Euskal Elkargoa asuma el compromiso de recoger y encauzar esta reivindicación.
Y es que, la mayoría de las vascas y los vascos no hemos tenido la oportunidad de ratificar o actualizar el marco jurídico-político vigente. No hemos elegido vivir divididas en tres ámbitos administrativos y dos estados. No podemos permitir que este tipo de decisiones estén en manos ajenas, deben estar en nuestras manos.
Es hora de dar voz a la ciudadanía, o tal vez, de que tomemos la palabra. Los y las vascas tenemos derecho a decidir nuestras instituciones públicas, nuestro estatus político y nivel de autogobierno, y las relaciones entre nuestros territorios de forma directa, libremente y sin límites. Como todas las naciones del mundo, tenemos derecho a la autodeterminación de nuestro pueblo. Por lo tanto, necesitamos herramientas de decisión a disposición de la ciudadanía, entre ellas, los referéndums.
Queremos decidir a través de referéndum y vamos a por ello. Y en ese proceso, la misión de las instituciones es regular y dar cauce a la voluntad de la ciudadanía. Precisamente, con el manifiesto Hamaika Gara hemos interpelado a las instituciones vascas para que “asuman, regulen y desarrollen la plena capacidad de celebrar referéndums”, recogiendo 21.389 firmas en plena pandemia. Y en esa misma dirección, el 18 de diciembre, presentamos la Declaración de Arantzazu junto a 100 personas referentes de Euskal Herria, haciendo un llamamiento a las instituciones para “institucionalizar y legislar el derecho a decidir”. No son las únicas iniciativas en este sentido: la sociedad ha mostrado durante años su voluntad y compromiso, tanto antes como después de que se creara Gure Esku, con las consultas populares, cadenas humanas y movilizaciones masivas que hemos llevado a cabo durante nueve años.
Hemos interpelado a instituciones de toda Euskal Herria y vamos a seguir haciéndolo. En Nafarroa e Ipar Euskal Herria también trabajamos para avanzar institucionalmente, pero hoy estamos en Gasteiz y nos toca dirigirnos al Parlamento Vasco.
Solicitamos al Parlamento Vasco que adopte los siguientes compromisos:
1. Abrir un debate, a más tardar en el curso político 2022-2023, para iniciar un proceso de decisión y determinar los pasos para decidir nuestro futuro político.
2. Que este debate sea transparente y abierto y que en él se escuche y se atienda la voluntad de la ciudadanía.
3. Basar el proceso de decisión en la participación ciudadana, previendo mecanismos e instrumentos para ello, incluyendo una consulta para ratificar la voluntad de la ciudadanía vasca.
4. Que el Parlamento Vasca le dé cauce a estos compromisos, y se logren los acuerdos pertinentes para convertir el derecho a decidir en ley.
En síntesis: hacemos un llamamiento al Parlamento Vasco para que retome este mismo otoño el debate que lleve a convertir el derecho a decidir en ley y habilite mecanismos que garanticen la participación de la ciudadanía en ese debate.
En cualquier caso, lo decimos claramente: interpelar a las instituciones no significa que nos quedemos a la espera de su respuesta. Nuestro compromiso para ejercer el derecho a decidir es firme e irreversible, y no vamos a aceptar ni bloqueos ni vetos a la voluntad mayoritaria, ya que es antidemocrático. Haremos siempre lo que esté en nuestras manos para avanzar, porque se puede hacer camino tanto en los parlamentos como fuera de ellos.
Por eso, hoy queremos hacer un llamamiento especial a toda la ciudadanía de Euskal Herria: ¡el 2 de julio, venid a iluminar La Vía Pirenaica! Catalanas y vascas iluminaremos cerca de 400 cumbres en todo el Pirineo. Utilizando faroles especiales y linternas, dibujaremos una línea de luz desde el cabo Higuer hasta Creus, desde el Cantábrico al Mediterráneo.
Lo haremos con tres objetivos principales: por un lado, queremos reclamar la atención de la comunidad internacional a favor del derecho de autodeterminación de los pueblos, ya que consideramos importante poner el foco en la raíz del problema, que no es otro que la incapacidad democrática de los estados para atender a una reivindicación legítima de la ciudadanía; así mismo, organizando esta movilización conjunta, estamos dando el salto de la solidaridad a la colaboración entre nuestros pueblos; y por último, queremos volver a ilusionarnos, marcando un hito para seguir avanzando hacia nuestra soberanía. Creemos que esta movilización puede contribuir a ello; ¡será una movilización espectacular, una experiencia inolvidable, un hito que perdurará en nuestra memoria!
Es el momento: ¡entrad en la web www.gureesku.eus e inscribíos!”